lunes, 23 de agosto de 2010

24 de Agosto - Dato curioso -

Dato curioso sobre la arquitectura

El hombre de Vitrubio es un claro ejemplo del enfoque globalizador de Leonardo que se desarrolló muy rápidamente durante la segunda mitad de la década de 1480. Trataba de vincular la arquitectura y el cuerpo humano, un aspecto de su interpretación de la naturaleza y del lugar de la humanidad en el "plan global de las cosas". En este dibujo representa las proporciones que podían establecerse en el cuerpo humano (por ejemplo, la proporción áurea). Para Leonardo, el hombre era el modelo del universo y lo más importante era vincular lo que descubría en el interior del cuerpo humano con lo que observaba en la naturaleza.


19 de Agosto - Pabellón Puente por Zaha Hadid

Para una de las clases la Arq. Paola no pidio buscar una foto arquitectonica. Yo escogi el Pabellón Puente de Zaha Hadid. Es una obra muy interesante hace ver como puedes diseñar una obra sustentable basandote en la propia naturaleza que nos rodea.

Pabellón Puente en Zaragoza, España
por Zaha Hadid




El Pabellón-puente de Zaragoza busca dos principios básicos desde su proyecto: armonizar el edificio con el entorno del río y hacerlo habitable, porque no se trata de un puente al uso, sino de un puente que actúa como un edificio cerrado, único caso en España. Tampoco está tendido directamente sobre el Ebro, sino de forma oblicua, buscando un doble efecto artístico: visual al exterior y de concepción del espacio al interior. Así, al exterior resulta espectacular, con su forma de gladiolo trenzado sobre el río y sus tábulas de metal solapadas como recubrimiento, que evocan en realidad la forma de un gigantesco pez antediluviano que parece dispersarse sobre el Ebro. Al interior el efecto no es menos fascinante, porque Zaha Hadid ha conseguido un espacio uniforme y unitario a pesar de que el edificio cuenta con dos plantas, que no obstante se comunican por rampas y sin accidentes visuales, logrando un espacio continuo a la par sinuoso por la propia forma irregular del puente. Parece además un interior de ciencia-ficción, con sus espacios blancos y luminosos, sus puertas de cristal que se abren automáticamente y sus pasillos ondulantes.

 
La base estructural del Pabellón-puente es de acero y cuenta con un único apoyo central que soporta casi la mitad de la carga de toda la estructura, 7.000 toneladas, lo que obligó a una cimentación de nada menos que de 72’5 m. de profundidad en sus pilotes centrales, y un sistema de anclaje único sobre pilotes repartidos entre las dos orillas y la isleta central que sirve de apoyo principal. Igualmente formidable resultó su sistema de volteo, pues exigió el lanzamiento de todo un cuerpo del puente de más de 140 m. de longitud y 2.000 toneladas de peso, desde la orilla en la que se construyó la estructura hasta su posición definitiva sobre la mitad del cauce del río, después de 125 m. de recorrido aéreo. Por lo demás, el Pabellón en cifras cuenta con 280 metros de longitud, y alturas y anchuras variables hasta un máximo de 30 metros.



En conjunto, la obra es de una extraordinaria plasticidad y ese maridaje que encuentra la arquitectura deconstructivista con la escultura queda aquí de manifiesto de forma bella y monumental. En este mismo sentido su aproximación a la arquitectura orgánica se advierte en la forma de flor y en el aspecto de saurio acuático. Pero si hemos dicho que Zaha Hadid es un compendio de las tendencias actuales de la arquitectura, también el Pabellón-puente tiene su deuda con el High-tech, puesto de manifiesto en el sistema térmico conseguido a través de la cubierta externa que recrea al interior un microclima natural.

17 de Agosto - Para los interesados en sustentabilidad

Outside the Academy


If your professors won't teach sustainablilty, find someone who will.

You are a design student. It's your first day on campus. You are given a bag of granola and dropped off in the wilderness. This is how students at the Ecosa Institute--the only design program in the country devoted entirely to sustainability--spend the initial three days of their semester.
A nonprofit organization located in Prescott, Arizona, Ecosa began offering its immersion program in fall 2000. The wilderness trek is meant to establish the baseline for sustainability. It also distinguishes the school's way of teaching the subject from the growing number of courses scattered throughout mainstream schools today. "Sustainability is really the critical issue of our time," director Antony Brown says. "And while I think the profession is moving very quickly toward beginning to incorporate that in their actions, there's a real need for a whole systems approach that doesn't just look at energy efficiency, land use, or isolated issues."
The one-semester program at Ecosa offers more comprehensive green-building knowledge than a traditional four-year architecture program. Design students hungry for a holistic program add Ecosa to their education--even though it isn't accredited--because they simply can't learn this stuff anywhere else. "I didn't feel that I could study sustainability at the University of Oregon without a lot of extra effort and time on my part," architecture student Alissa McNair says. "The curriculum at Ecosa provided me with the broadest introduction to sustainability possible in sixteen weeks."


In Ecosa's classroom, work progresses quickly. Fifteen or so students of architecture, design, and planning--a mix of undergraduates, grad students, and some practicing professionals--start by designing residences for real clients from the community. Throughout the process experts are brought in to discuss issues such as solar design and materials. The group also takes field trips: they've studied regional building wisdom at Hopi and Navajo reservations, gone to green architect Will Bruder's studio, and visited Tucson to analyze New Urbanism, co-housing, and permaculture landscaping. By the end of the semester they work in teams on larger, more complex public projects; last term included a children's museum for the Embry-Riddle Aeronautical University and a multidisciplinary facility for Prescott College.
"To teach sustainability requires a completely different approach to design education. You can't teach whole systems thinking and integrated systems like you teach technical drawing skills," operations director Rob Israel says. "Other programs are still teaching a course for maybe an hour and a half, and then the students go on to their next class and do something completely different. It's kind of an add-on rather than the core curriculum."
www.ecosainstitute.org